Entrevistado en su oficina de la Inmobiliaria "Las Puertas", Óscar Gutiérrez recibe a la reportera con un inesperado entusiasmo y, de la que pareciera ser una sencilla plática, surge una acalorada conversación que aporta datos reveladores que también refrendan sus abogados Óscar de la Fuente, Salvador García y Marisol Guerrero, quienes alegando razones de seguridad, se negaron a ser fotografiados.
Según su versión de los hechos, el trato inicial entre ambas partes consistió en que Óscar Gutiérrez aportara siete millones de dólares con los que adquirió el 50 por ciento del fraccionamiento y del campo de golf y obtuvo como garantía 232 lotes, mientras que Díaz se quedó con 400, mismos que fueron escriturados. Durante ese lapso, Gutiérrez del Bosque se percata de que existen irregularidades en los libros de contabilidad de la empresa y es aquí donde interpone una demanda que busca bloquear la venta de los terrenos propiedad de "Las Puertas" y a su vez, Aldo Díaz hace lo mismo con su socio solicitando la nulidad absoluta por ilicitud de una escritura pública en que se protocolizó un contrato de compra-venta, reclamando la cancelación de la inscripción de dicha escritura, entre otras prestaciones.
Los juicios se han llevado desde junio del 2003, fecha en que Inmobiliaria "Las Puertas" metió en la inmobiliaria de Aldo Díaz una medida cautelar inscrita en el Registro Público de la Propiedad que no le permite vender. Esta demanda ha corrido por varios juzgados: primero por el Quinto de lo Civil, después por el Primero de manera provisional, luego al Segundo y finalmente en el Tercero.
Según Gutiérrez del Bosque, Aldo Díaz tiene congelado el juicio gracias al tráfico de influencias.
Otro de los problemas graves por los que pasa este fraccionamiento, son los adeudos que arrastra desde hace años, como el pago del impuesto predial y el ISR, cuyas cantidades son de 15 y 70 millones respectivamente. Mientras Gutiérrez del Bosque alega que desconocía los malos manejos administrativos de su socio, 500 familias compradoras, la mayoría miembros de la alta sociedad como los García Lesprón, los Issa y los Cantú se hallan afectadas por la falta de servicios e imposibilitados de escriturar sus terrenos, aunque sólo Rene Cantú Charles ha demandado a Aldo Díaz.
Como un recurso legal, a Gutiérrez del Bosque y a su esposa, Norma Alicia Izquierdo, se les imputó de lavar dinero y de tener nexos con Carlos Ahumada, según argumentos de Mario Villarreal, abogado de Aldo Díaz.
Aunque Óscar Gutiérrez acuse a Aldo Díaz de haberlo engañado, su socio de igual forma le interpone otros cargos que bien ponen en entredicho su reputación, como la procedencia de los 7 millones de dólares que aportó cuando su empresa de videojuegos, "Games de México", se encontraba en una etapa de suspensión de pagos de 1995 al 2004, así como el sospechoso caso de un grupo de pensionados y jubilados provenientes de Estados Unidos que buscaban invertir en el club campestre de donde él aseguraba provenían sus recursos.
En su opinión, estos actos no constituyen un delito y nadie es autoridad para señalárselos más que Hacienda o la PGR.
-¿De dónde obtuvo 7 millones de dólares?
-Ya le dije. Tenemos 40 años trabajando y desde hace 25 tuvimos la fortuna de pegarle al Atari, al Nintendo y después a la bolsa, al mercado de valores y de eso ya tiene copia Hacienda. Tenemos gimnasios, colegios y bienes raíces...
-¿Esto genera esa cantidad de dinero?
-Sí, siempre hay buenos años en el mercado bursátil y nosotros agarramos excelentes años.
-¿Qué ocurrió en el caso de los jubilados y pensionados norteamericanos?
-No es delito promover inversiones de Texas o de donde sea, no lo prohíbe la ley. Intento traer capital extranjero y eso no es delito, los inversionistas aún no vienen pero espero algún día hacer la aportación, si la hago, no es delito.
-¿Por qué no llegaron entonces?
-Porque aún no se hace la operación. Porque no está terminado el fraccionamiento, porque no hay confianza, porque no quieren, no sé. La operación no se ha concretado pero conozco a extranjeros que quieren invertir en México sin embargo, i no es un delito!
Gutiérrez del Bosque refuta toda acusación, todo se lo atañe a intimidaciones de Mario Villarreal que lo señala como agiotista por haberse declarado en quiebra hace 10 años y por adquirir una gran cantidad de inmuebles.
"En cinco meses no se ha vendido nada en Los Azulejos, si los torreonenses no compran, menos los de afuera. Me señalan como una persona mala por querer invertir. ¿Pero qué tienen que ver estos juicios? Tuvimos 19 auditorías de Hacienda y no nos hallaron nada".
-Pero si estaba en suspensión de pagos y siguió adquiriendo inmuebles...
-No es delito, y si lo es, que me metan a la cárcel. Esta demanda no está fundada, no hay elementos, son puros cuentos. Hace 12 años el banco me prestó dinero para comprar acciones de su mismo banco, ellos cometieron el delito. Mi dinero lo tengo en mis negocios. ¿Qué delito tiene defenderme? -exclama airado. También se le atribuye el ser prestanombres, después que trascendió que su doméstica, Margarita Virgil viuda de Páez, maneja cheques con cantidades estratosféricas de dinero, mismos con los que efectuó un contrato de mandato. Le otorga esas facultades, dice, por considerarla una persona de su entera confianza y que para él es como "una segunda madre".
"SE LE DEBE PERO NO ES SOCIO..."
Se acudió con Mario Villarreal Rodríguez, abogado de Aldo Díaz, que en lugar de defender a su cliente ataca constantemente a Gutiérrez del Bosque. Sus opiniones respecto a este tema se perciben más personales que profesionales.
"Los esposos Gutiérrez Izquierdo hacen creer que sus recursos provienen de los pensionados norteamericanos y le prestaron dinero a Aldo Díaz, él siempre ha aceptado que debe dinero, que ellos se lo prestaron, pero la garantía se hizo grande, lo protocolizaron y lo inscriben y así tratan de quedarse con la garantía que vale más que el importe del crédito. Por eso de la ilicitud y el notario actuó mal y lo suspendieron".
-¿Entonces por qué Gutiérrez del Bosque acusa a Aldo Díaz?
-Y acusan al procurador y a todo mundo pues quieren quedarse con lo que no es de ellos, y si la razón les asiste ¿por qué hacer tanto escándalo? Este es un asunto jurídico como cualquier otro.
-¿Qué pasó con la asociación que tenían ambas partes? ¿Por qué se separaron?
-Porque nunca fueron socios, el señor Gutiérrez prestaba dinero y si el señor lo fuera ya tendría acciones, le digo que ese dinero decía que era de un grupo de pensionados, ahí están los periódicos donde los presenta como tales.
Aunque según una escritura proporcionada por Gutiérrez, con número 156 bajo la notaría 44 con fecha del 13 de julio de 2001, se registra que ambas partes, junto con sus respectivas esposas, Norma Alicia Izquierdo y Teresa Muñoz Caraveo, conformaron una asociación mercantil de nombre "Ultralyanz SA. de C.V." de la que hasta la fecha no se han deslindado.
Se le cuestiona al abogado sobre el sonado juicio de simulación de parte de Díaz del que niega tener conocimiento alguno.
"El señor Díaz está demandando la nulidad de las escrituras, no es un contrato de compraventa. Eran sólo garantías".
-¿Por qué se comenta que su cliente debe millones en impuesto predial?
-Es como si yo le preguntara por qué Óscar Gutiérrez no enteró de todo lo que tenía en suspensión de pagos, si Aldo Díaz debe dinero no le compete a nadie, no desconozco que no lo haya pagado pero ¿cuántos debemos el impuesto predial? Primero, no sé si lo ha pagado o no -se contradice- y si no lo ha hecho es porque no tiene dinero. ¿Por qué está tan preocupado Óscar Gutiérrez? Él no es el "defensor de la comunidad".
-Sí, pero aquí hablamos de millones de pesos y eso no es cualquier cifra.
-Pues eso habría que preguntárselo al presidente municipal...
-Se dice que Aldo Díaz ha cometido un fraude por no instalar los servicios básicos en el fraccionamiento...
-Quiero oír que los dueños lo digan, los terrenos de ese fraccionamiento se vendieron y se pactó. Ambos han tenido reuniones con funcionarios y Gutiérrez los echa con el pretexto más tonto. Un día se estaba hablando de precios, de cantidades y de la forma de pago y el señor se enojó y se fue sólo porque habían sacado una caricatura de él y su familia. El gobierno estatal ha intentado que ambos concilien pero el señor se molesta por todo.
Se buscaron testimonios de compradores afectados respecto a la abrupta declaración de Villarreal, pero sólo la notaria pública, Olivia Chibli, declaró que ella ya obtuvo sus escrituras pero Díaz había prometido mucho para el fraccionamiento, "es tan prepotente que no permitía que se construyera nada en los terrenos ni que se vendieran, la segunda parte del fraccionamiento debió estar terminada ya pero sólo el área donde se encuentra su residencia es la única que está en buenas condiciones mientras que el resto está cubierta por la yerba". No recuerda el costo del lote que adquirió, sólo que lo compró en prevenía y que el precio está desacreditado. "Nos agarraron en nuestros cinco sentidos", afirma.
Solicitamos al abogado Villarreal documentos que avalaran sus dichos pero afirmó no tenerlos disponibles, por lo que sugirió que se acudiera directamente al Juzgado en cuestión.
Ya molesto, propone a la reportera que no se publique su entrevista si trae a Aldo Díaz a dialogar con ellos. Después de que esta rechaza la petición, Villarreal llama a su cliente tanto a su celular como a su domicilio particular donde nunca se le localizó. Al día siguiente, la secretaria del abogado le concreta una cita a la reportera para el jueves de esa semana en Los Azulejos, sin embargo, el señor nunca se presentó y el abogado no volvió a comunicarse. Los reporteros acuden a la supuesta entrevista con Aldo Díaz en el club Los Azulejos. La vista no es precisamente la mejor: en medio de ese inmenso campo se perciben unas cuantas residencias, pero sólo una pequeña cantidad terminada, el resto es tierra ociosa. Su famoso campo de golf se encuentra parcialmente erosionado. El sector interior no se queda atrás: el salón de reuniones sociales está casi desértico al igual que su restaurante donde sólo unas pocas almas se dan cita para tomar el café. Lo único concurrido es la cancha de fútbol en medio de ese entorno desangelado.
Existe desatención; los trabajos de urbanización están abandonados, el mantenimiento tiene problemas y las ventas están paralizadas, mientras que el precio de los terrenos se ha venido abajo y quienes compraron de contado tienen dificultades para escriturar, estrictamente se encuentran dentro de un fraude cuando pensaban que habían realizado una excelente inversión.
Originalmente todo se comercializó como un fraccionamiento de lujo si se toman en cuenta las cantidades que valía el metro cuadrado: mientras que la zona sin urbanizar cuesta 494 pesos, el sector interior vale 989, el campo de golf 591 y el más elevado de todos: el área frente a éste con 1,524 pesos, según las cifras tomadas extraoficialmente de las tablas de valores de terreno urbano en el departamento de tesorería municipal. Los precios reales eran mucho más altos pero hoy se han caído. Esta reportera y el fotógrafo se sientan en una mesa repleta de mosquitos muertos, transcurren los minutos y el entrevistado no aparece.
Se presenta un hombre moreno, maduro, que viste camiseta blanca y lentes. No es Aldo Díaz como se había prometido, se trataba del administrador de "Los Azulejos", Manuel Velasco Verduzco. Se disculpa por la tardanza, "el señor Díaz no pudo asistir porque acaba de salir a Monterrey", se excusa. Una gota de sudor le recorre la mejilla izquierda. Saca una grabadora para registrar la entrevista.
Al igual que el abogado Villarreal, asegura que la demanda se inició debido al préstamo que le otorgó Gutiérrez a Díaz y los lotes garantizados están valuados en 198 millones de pesos y que el adeudo que se tiene es de 56 millones.
A decir de la carestía que embarga al fraccionamiento, Velasco afirma que éste apenas está en fase de urbanización, la obra ya está contratada y se espera que se termine a principios del 2006 conforme lleguen los colonos. En electrificación se les otorgan los servicios complementarios, se contempla acabar todo el circuito para que haya comunicación en los terrenos.
La reportera insiste con la pregunta sobre el fraude a los colonos:
"No lo puedo rebatir en el sentido de que no se hayan otorgado los servicios. Los que viven aquí disfrutan de ellos y se van reforzando las acciones para la calidad de vida" -declara el gerente- sólo son 20 las familias que habitan aquí, hay otras 20 construcciones en proceso y los demás compradores tienen sus proyectos.
-¿Ha dialogado con las familias afectadas?
-Bueno, al menos con Rene Cantú Charles existe una demanda en desarrollo, hubo una serie de operaciones con la Inmobiliaria que le cedían terrenos. Aquí se trataba de una permuta para obtener terrenos y retribuirle su tierra integrándose y con sus lotes a la vez en el fraccionamiento.
-Entiendo que tienen adeudos de predial. ¿Ha habido alguna asociación entre ellos que les permita no pagarlo?
-Se liquidaron adeudos parciales al municipio, tratamos de regularizar ese compromiso y lo hemos platicado con Jorge Hamdan y con el director de ingresos. Queremos que el comprador regularice su terreno a su nombre pero no se pueden escriturar. El fraccionamiento está dividido y la etapa 1 y 2 ya están listas para escriturar y las otras dos están en trámites para ello. El 80 % está en trámite y el 20 restante es de la tercera y cuarta etapa.
-Si hay deuda es porque existe un déficit.
-Sólo si lo vemos fríamente. No es un adeudo de un predial sino de 700 lotes que ya vendió "Los Azulejos", y de acuerdo a las promesas de compra-venta se establece que el comprador absorba el pago de impuestos y gravamen de todo tipo de compra-venta.
Cabe destacar que a este fraccionamiento se le condonó el Impuesto Sobre la Adquisición de Inmuebles a petición de "Las Puertas" respecto a una operación de enajenación de parcelas en "Los Azulejos", según el acta de cabildo número 87 en la sección trigésimo primera de diciembre de 2002 y de la misma manera, por unanimidad de votos, se le concedió al proyecto una condonación del 70 % de los derechos por expedición de la licencia del mismo, según se estipula en el acta 78 de la vigésima novena sección del 5 de septiembre de 2002.
-¿Para qué se requería este estímulo? ¿Por qué no tenían recursos si Óscar Gutiérrez aportó 7 millones de dólares?
-Vamos a verlo desde otra perspectiva: 7 millones es un número considerable pero en este fraccionamiento hay mas de 50 millones y también está la mecánica de flujos que se requiere para su desarrollo.
-¿Qué hace aquí Javier López Arteaga?
-Es un colono, es el asistente del señor Aldo y la ventaja que posee son sus relaciones con Óscar y con "medio mundo". Él no trabaja aquí, sólo vive en este lugar y juega golf como otros.
La reportera inquiere sobre los nexos entre su patrón y personajes como Raúl Sifuentes y Carlos Ahumada. Se muestra dubitativo.
'A Sifuentes se le invitó a alguno de los eventos cuando dio inicio el proyecto. En cuanto a Ahumada, no sé, yo recuerdo que hubo una asociación de colonos que había convocado el ingeniero, no estoy seguro si fue aquella vez, no lo puedo afirmar, sólo tengo entendido que Ahumada estaba con el plan de construir el estadio por acá, quizá porque estaba interesado en conocer la infraestructura que lo rodeaba".
La "promoción" que algunos medios han ejercido en su contra los ha dañado al grado que la gente ya no quiera comprar terrenos, sólo utilizarlos como inversión. Pero es inadmisible que un fraccionamiento con mas de tres anos instalado continúe careciendo de ocupación, pues según Velasco, de los 1,200 lotes que lo conforman sólo hay 50 construcciones de las cuales 20 están deshabitadas.
La entrevista finaliza, los reporteros se dirigen a tomar fotografías del sitio y son escoltados por el gerente hasta el auto del reportero gráfico.
TERRENOS SIN VALOR POR IMPUESTOS
A decir del tesorero Jorge Hamdan, el asunto del pago del predial va para largo y no parece que vaya a resolverse en esta administración que está por concluir. Sólo atina a comentar que las negociaciones han sido "en muy buenos términos" pero no sólo en el caso de Los Azulejos sino también con Montebello, de los que desconoció saber el monto total del adeudo de cada uno. "Nosotros hemos insistido desde el 2002, se ha trabajado en función de cobranza para el término de la administración para que se tengan avances importantes".
No obstante, por alguna extraña razón, no ha habido embargos de parte del Ayuntamiento.
"Hubo algunos recursos de administración de ejecución que también están siendo valorados para poder determinar la particularidad de las alternativas jurídicas que podamos tener".
Con toda tranquilidad, señala que si se termina este periodo y no se cubre el adeudo, éste sigue acumulándose para el siguiente, y a pregunta de la reportera de si es ahí donde debe actuarse con mayor coercitividad declara: "Hay alternativas jurídicas que se están realizando y se determinarán en su momento una vez que se hagan estos cálculos y los procedimientos que se puedan utilizar. Ellos, como cualquier otro contribuyente, tienen el derecho de interponer estos recursos que se opongan a su procedimiento. Estamos revisando los recursos que han presentado para determinar las opciones jurídicas que tenemos. Siempre la autoridad alternativa de poder iniciar procedimientos administrativos de ejecución le están perfectamente definidos, los pasos de la ley y en su momento podrían iniciarse consecuencias más severas pero hasta ahora los acercamientos han sido 'en muy buenos términos' y se espera se resuelva al final del trienio.
Además, hace hincapié en una propuesta de pago en terrenos que le ha ofrecido "Los Azulejos" sin ahondar en más detalles.
Se le cuestiona también sobre la condonación del ISAI, el cual fue valorado en la pasada administración por el cabildo por la generación de empleos que representaba, pero que desconoce la postura de los ejidatarios a los que les compraron las parcelas.
Respecto a la intervención de Aldo Díaz, refiere que "es un contribuyente más", dice desconocerlas relaciones personales que tenga con Guillermo Anaya y la injerencia que pudiera tener en este caso. A Javier López lo considera como un interlocutor.
Para ahondar en esta investigación se buscó al primer regidor Rene Nahle, a Salvador Hernández, director del departamento de catastro y al notario público José María Iduñate, quienes nunca atendieron los llamados, por lo que se acudió con José Luis Dovalina, director del Registro Público de la Propiedad que, con tono agresivo, respondió a las interrogantes sobre la escrituración de terrenos con respuestas como: "No sé de qué me habla", "no tiene nada que ver", "yo sólo registro".
Al menos lo que se tiene inscrito es que "Las Puertas" le compró los terrenos a "Los Azulejos". No obstante, Gutiérrez del Bosque hablaba de una nota marginal con la que están asentados los 232 lotes, cosa que le ha traído muchos problemas, por lo que Dovalina, enfadado, lo confirma pero confiesa haberla aplicado porque se lo ordenó el Juzgado Quinto bajo la instrucción del juez Gallegos Márquez quien también recibió una sanción. Y respecto a la escrituración de terrenos señala que no se realiza porque "ese es otro asunto que nada tiene nada que ver".
NEGOCIOS DE LENGUA Y DE SALIVA
Resulta increíble el embrollo legal y financiero en el que se halla este club, uno más de los grandes negocios recientemente realizados en Torreón a base de saliva.
El aparente accionista principal, Aldo Díaz, quien evita dar la cara, está en una situación muy delicada, lo mismo que los 500 particulares que compraron de buena fe, casi todos ellos miembros de acomodadas familias de la localidad.
Las tierras fueron adquiridas a campesinos a un precio irrisorio, obteniendo de parte del gobierno municipal, entonces presidido por Salomón Juan Marcos Issa, una serie de canonjías inexplicables.
Según consta en documento firmado por ambas partes, Aldo Díaz recurrió a Óscar Gutiérrez para obtener 7 millones de dólares, compartiendo la propiedad del fraccionamiento pero posteriormente la operación quedó en un financiamiento que estableció como garantía 232 lotes.
Aldo Díaz estaba imposibilitado para saldar sus adeudos, pues inclusive, varios de los trabajos hechos en el club fueron financiados por medio de intercambios. A partir de ahí, Óscar Gutiérrez hace efectiva la garantía del crédito y bloquea la escrituración en el Registro Público de la Propiedad. Aldo Díaz abre un juicio para nulificar la escritura de la operación y utiliza otros recursos para alargar el proceso: acusa a Gutiérrez Del Bosque de obtener recursos financieros de fuentes ilícitas, solicitando a las instancias oficiales que se investigue, además de acusar, por situaciones fiscales irregulares entre otras cosas. Esto alarga muchísimo el proceso y lo complica pero le permite comprar tiempo. Exhibe a su acreedor en una serie de situaciones financieras oscuras, aún cuando las autoridades certifiquen que no se ha encontrado delito alguno.
Como consecuencia, "Los Azulejos" está paralizado. En lo que va del 2005 no ha habido ventas, nadie quiere construir, los precios se han ido al piso y la sociedad está en la insolvencia, al grado de que el futuro del club campestre es de total incertidumbre, no obstante, Aldo Díaz se construyó una mansión en un terreno de 3 mil metros cuadrados, lleva un tren de vida de lo más caro, transita protegido por guardaespaldas, en tanto que Óscar Gutiérrez podría haber hecho el peor negocio de su vida, pues al conflicto no se le ve salida: los 7 millones de dólares, cualquiera que hayan sido su origen, se han esfumado, virando la situación a un fraude multimillonario.
Lo inquietante es: ¿cuántos grandes negocios inmobiliarios en Torreón están soportados financieramente también con saliva? Al cierre de esta edición, se publicó una nota en El Siglo de Torreón con fecha del 7 de octubre sobre un caso muy similar a éste pero con la inminente llegada del "Laguna Trade Center", en el que también se denuncia un fraude entre inversionistas extranjeros y empresarios locales, de ser así, es una muestra más que la región se presta para crear negocios "de saliva", con lo cual se pone en riesgo la confiabilidad de la inversión en esta tierra, lejos de lo que el gobierno municipal o estatal quieren mostrar como un lugar de oportunidades económicas en la que sus negocios sólo funcionen como paliativo de su propia realidad .
