Cuando Natasha Khan (Londres, 1979)
debutó con su proyecto Bat For Lashes en 2006, surgió como una propuesta
étnica, oscura y hippie, influenciada por bandas como Cocteau
Twins y una dosis de Dead Can Dance, rindiendo tributo a sus orígenes de
Medio Oriente. Su imagen y estilo musical exóticos contrastan con la
cultura inglesa en sí y muchas de las cantantes británicas de la
actualidad. Escucharla es como mirar la luz de las velas, oler el
incienso, sentirse en un ambiente de abstracción. No contonea las
caderas como Shakira, pero sus manos tocan el piano, la guitarra y las
percusiones.
Durante sus años escolares fue víctima del bullying debido a
su fisonomía arabesca; tiempo después supo sacar ventaja de esto y lo
transformó en su orgullosa imagen y discurso musical, primero con el
disco Fur and Gold, nominado al Mercury Prize en 2007 con mucho folclor, piano, percusiones y handclapping. En su segunda obra lanzó el misterioso y romántico Two Suns (2009), con canciones como “Daniel”, “Pearl’s Dream” y “Sleep Alone”, para la parte final buscó al viejo crooner Scott Walker uniendo sus voces en “The Big Sleep”, a manera de broche de oro.
La banda inglesa Coldplay se acercaría a ella para invitarla como telonera para formar parte de su gira promocional del álbum Viva la vida,
que incluyó presentaciones en el Distrito Federal y Monterrey. Con la
desventura que durante ese concierto de marzo de 2010, algunos
despistados asistentes la desconocían y hasta hubo quien tuvo la osadía
de preguntar ingenuamente si se trataba de Yuridia de La Academia,
por su parecido físico. El público no puso atención a su música aquella
noche, ya fuera por ignorancia, desinterés o porque las cervezas frías
resultaban más sustanciosas. Mala señal, especialmente para Ringo Starr o
Thom Yorke, quienes llegaron a reconocerla como su cantante moderna
preferida.
DE HOMBRES Y ESPECTROS
Con The Haunted Man, lanzado el 15 de octubre, encontramos a
una nueva Natasha, en cuya portada en blanco y negro se muestra desnuda
y sin maquillaje, cargando sobre la espalda a su “hombre fantasma”,
igualmente desnudo; obra del fotógrafo estadunidense Ryan McGinley en
homenaje a la honestidad y vulnerabilidad que implica la desnudez con un
look muy al estilo de Patti Smith, de cabello corto y oscuro, según declaró a la revista inglesa New Musical Express. Quizá lo más intrigante de la fotografía no sea ver su delgado cuerpo expuesto, sino su gesto serio y mirada profunda.
En esta nueva entrega, de estilo folk y étnico, sin caer en formulas
ya probadas, recurre a sus fetiches como astros, caballos, flores… pero
ya no es la Natasha de melena oscura ataviada de vestidos largos,
tiaras, plumas y cara pintada en sus presentaciones en vivo. Pearl, el
personaje rubio que se creó a manera de alter ego para el disco Two Suns, ha quedado sepultado.
En julio lanzó como primer sencillo, desde su sitio oficial, “Laura”,
una suave balada de piano con su característico estilo bucólico. La
música de Bat For Lashes requiere atención y paciencia para escucharse;
no sonaría en el bar de moda ni en la rocola de alguna cantina, sino en
un ambiente de intimidad e introspección.
Después vendría “Marilyn”, una deliciosa pieza dream pop, en
clara referencia a Marilyn Monroe, el nuevo sencillo “All Your Gold”
recorre YouTube con su respectivo video. Curiosamente, algunos escuchas
le encuentran semejanza con el hit “Someone I Used To Know” del grupo
australiano Gotye, aunque esta canción fue escrita originalmente en
2010. Desde entonces Bat For Lashes ya contaba con una vasta colección
de canciones que escribió mientras se encontraba de gira como para crear
un nuevo disco, pero sin conformarse con esto decidió invertir más
horas de trabajo y ampliar los temas de sus letras. Otras de sus nuevas
canciones son “Lilies”, “Horses In The Sun”, “A Wall”, “Rest Your Head”,
“Winter Fields”, “Oh Yeah”, “Deep Sea Diver” y la que le da nombre al
disco: “The Haunted Man”.
ADIÓS A LOS DOS SOLES
Algunos medios británicos como The Guardian, The independent y revistas especializadas como Uncut y New Musical Express
han dado críticas favorables. Tal vez no venda millones, pero la moneda
apenas ha sido lanzada. La que algunos han llegado a considerar como
“la nueva Björk” quizá se queden lejos en su definición. Natasha busca
su propio camino sin parecerse a la cantante islandesa.
Caminando por las calles de Londres durante un viaje que hice a
Inglaterra en 2009, descubrí que el ambiente y las noches tenían otro
sabor más allá de lo que se muestra en los folletos turísticos. Escuchar
la voz de Natasha sobre el puente de Londres me remitió a una sirena
distante y oscura, a un murciélago que emprende el vuelo nocturno y
había hechizado mis oídos. Sin el sonido de Two Suns, mi paseo británico no hubiese sido igual.
twitter: @miricaiba