Vive Latino 2010

Ayer me di una vuelta tardesón por el Vive Latino y sólo pude ver unas cuantas bandas. Me metí a ver a la señora Toussaint en el escenario rojo, pero me salí rápido porque vi que el desmadre estaba con Mago de Oz a quienes nunca había visto en vivo y la neta sí me gustaron. Hubiera querido que mi pequeño hermano Luis (buen fan) estuviera ahí conmigo, pero nel. Después me encontré a mi amiga Jess con su banda y vimos a los Deftones que serán más famosones, pero se me hicieron de hueva, además de que ya me estaba mareando por el litro de chela Indio más caro que había pagado en mis menos de 30 años: ¡70 lanas!, pero mejor esa marca que la Sol. Guácala.

Vimos a los Deftones, su sonido estaba de la verga, retumbaba mucho y estaba tan estridente que sólo se escuchaba la voz del vocalista, así que podía oír bien todo lo que me decía Jess, y eso que estábamos cerca de las bocinotas izquierdas. La verdad poco conozco de esta banda, no me gusta para nada el Nu metal y si no son meramente latinos, excepto por dos de sus integrantes y aparte cantan en inglés, no le encuentro mucho sentido a su presencia. Además, la gente no estaba tan prendida como con "Mago", con quienes sí se les notaba una conexión chida. Mejor nos largamos de ahí.

La chelota tenía que hacer efecto en mí pronto, por lo que tuve que visitar los puerquísimos baños. Chale, ya ni papel había ni mucho menos jabón para lavarse las manitas y olían a lo que toda letrina improvisada puede oler. Ya ni modo. Me fui a compar una botella de agua de 25 pesos. Sí, eso cuestan, más que un garrafón.

Jess y compañía preferimos movernos al escenario rojo otra vez para ver a Dj Silverio "Su majestad imperial" quien el año pasado armó un hiper-mega desmadre en la "carpa intolerante" (me cae que ahí descubrimos el por qué de su nombre). Puros empujones y apretones, una marea humana. Mis pobres tenis se jodieron ahí, pero mis chichis al menos quedaron intactas. Este año no esperábamos menos.

Todo empezó bien con el discurso de este orate con sus trajes nacos de lentejuelas, pero el sonido... ¡oh, el sonido! estaba más chafa que el de los Deftones, tan es así que la gente se la pasaba gritando: "¡súbele, súbele!" Y el güey sí le echaba huevos a su performance, pero como que no prendía, no tuvo nada que ver con el desastre que se armó el año pasado. Lo más cagado fue que a mitad del show salieron unas morras contoneándose para hacerlo más kitsch y ni así. Y.... y...lo que nadie esperaba era que para cantar "Super ídolo" llegaría ni mas ni menos que ¡Charlie Montana! ¡Jooodeerr, y yo que creía que se trataba de un personaje ficticio y ya vi que sí existe en la vida real! ¿Qué onda con ese panzón y sus pelotes de toronja?

Quizá el momento verdaderamente memorable fue cuando alguién del público le tiró una de sus muletas y Silverio la agarró para pegarle a su consola al ritmo de "¡Yeeepaa, Yeeepaa, Yeeepaa!" "Su majestad imperial" se quito su traje amarillo para mostrar el poco apego que le tiene al fitness, pero no hizo lo mismo con su tanga roja para que le diera el aire al "pequeño Tony". No, no me gustó la actuación de Silverio este año, me pareció muy tibia ahora que le dieron un escenario más grande y le cayó más banda. Y todo por culpa del chafa sonido.

Ya para salir tuvimos que apretujarnos entre la multitud que salía de la terracería; se me metió polvo a la garganta y a la nariz, acabamos como semita. Nos dirigimos a ver a las Víctimas del Dr. Cerebro. Desde hace como 15 años pensaba que una banda con un nombre tan rudo podía tener unas rolas pesadísimas y son totalmente lo contrario, bien poperonas y hasta fresas, al menos las más conocidas, así como The Cure y su look seudo darketo, sólo que su vocalista no es Robert Smith. Su show también estuvo bastante regular, excepto cuando cantaron "El cadáver del amor" donde bailaron unas chicas del burlesque de muy buen ver, no como las de Silverio. Creo que era sólo el recurso para llamar la atención... y después de ahí me fui.

Este año no viví el desmadre del anterior. No pude llegar más temprano por estar ocupada en prioridades (si, ajá) y ya no encontré una bola de pubertos que arrancaran un pedazo de alfombra para usarla como catapulta. La última vez me volaron por los aires y los escuincles calenturientos gritaron al unísono: "¡chichis 'pa la banda!" Como no se las quise enseñar y me querían manosear a huevo, tuve que pegarle a uno de ellos (ji ji ji ji) ¿Por qué será que en el "reglamento" del Vive no mencionan nada sobre respetar a las chavas? Me cae que es más importante a que te prohiban que te pongas "loco o psycho" (sic). o pedo, ese ya es ídem de cada quien. ¡Ptsss!, ¡qué fresas me salieron!

El video se ve del averno, pero fue el único que me encontré

La reseña del año pasado aquí:

http://lamosca.com.mx/vivelatino.html

Un atento lector autodenominado "unChingon" me dejó este amable comentario:
"eres una pendeha jajaja seguro bailaste como gnomo con los putos de mago de oz haha".

A juzgar por su precisa ortografía y evidente modestia ustedes determinarán quién es chingón y quién pendeh@ (sic).