Ya pasó la FlL de Guadalajara y como es tradición volví a acudir después de 5 largos años. Esta vez con Alemania como invitado de honor. ¿Y qué encontré esta vez? Pues lo que todos ya sabemos, la burreza de Peña Nieto para hablar sobre los libros influyentes en su vida y la metida de pata posterior de su prolita. Yo digo que ser chica mala y pendeja es lo de hoy, la recompensa es aparecer en la portada de Playboy México y sólo esperemos que la "Peñita" cumpla la mayoría de edad para posar ahí, a menos que su apá le firme una autorización previa. Pero a lo que íbamos: el priísta llegó a Guadalajara dándose ínfulas de cuasi ganador de las elecciones acompañado de..¡sí! ¡La Gaviota! Con su porte, gallardía y mamonería impidió el paso a muchos reporteros, la mayoría visiblemente irritados. Algunos camarógrafos de TV Azteca hasta tuvieron que obtener la imagen directamente de los monitores del exterior de la sala Juan Rulfo donde se hizo el mitin disfrazado de presentación de libro. ¿Y el público? No hay duda que el ex "gober geloso" es el Luis Miguel de la política, las mujeres gritaban como si éste se apersonara y algunas hasta temblaban de la emoción. “Ya pueden morir en paz” Les dije.
Lo bueno es que esa misma tarde ese mal sabor de boca se olvidó gracias al buen humor de Trino y Andrés Bustamante- caracterizado como Ponchito- cuando presentaron el libro “Historias sobre el fin del mundo y otras patrañas”. Nos hicieron cagarnos de la risa en la misma sala compartida con el priísta. ¡Como hay gente que ve la vida de una manera tan diversa! Mientras el otro llegó como principito, estos loquitos llegaron muy desenfadados y con mucha simpleza a interactuar con el público. ¡Todo un deleite!
Aunque últimamente la FIL tiene la particularidad de juntar a personajes tan dispares entre si: por un lado están Fernando Vallejo que aprovecha la plataforma para ponerse como lazo de cochino a todos los políticos y la semana siguiente llegan Marcelo Ebrard, la Vázquez Mota y el susodicho tricolor; Alejandro Jodorowsky y ¡Tatiana! (por separados, claro), el corresponsal español Alberto Peláez y Carlos Loret de Mola en cuya ponencia salió corriendo a los 30 minutos exactos evitando todo cuestionamiento sobre sus recientes escándalos; el homenaje al monero Magú con La Catrina, poco concurrido a diferencia del año pasado con su “colega” El Fisgón. No alcancé a ver a Stereo Total el viernes por la noche, pero vi a otra banda que se llama SUPER 700 y de ahí presentaron a los nuevos invitados que será Chile en 2012.
En este 25 aniversario cayó de todo: familias enteras, hispters, intelectuales, hippies y esa nueva fauna llamada “tuitstars” de quienes me pregunto si realmente habrán puesto atención a las conferencias o solo estuvieron al pendiente de sus menciones a través de los teléfonos móviles…
2 comentarios:
Reseña a toda madre, ya me estoy tardando en ir a la FIL en Gdl... la vez pasada por cuestiones de trabajo no fui cuando estuvo Ray Bradury...en fin
Me encantó tu review...
Ese pelmazo ni deberia de estar en la FIL , mínimo una colección de Tv Notas que le regalen al copetón.
Pues deberías, cada año hay algo distinto. No fue Ray Bradbury en 2009, se trató de una videoconferencia. Y sí, Peña Nieto pagó caro su presencia.
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