martes, julio 12, 2011

Una noche en Coyoacán

Me enviaste un mensaje al celular y me pediste que nos vieramos:
"Que sea a las 6:00pm en la Plaza de la Conchita de Coyoacán"-te respondí.
Me dirigí hacia allá a pie. Atravesé las calles empedradas, meditabunda, pero decidida a hacer lo que tenía en mente.
Llegué primero que tú, decidí esperarte sentada en una banca.
En eso apareciste con una chamarra azul y una sonrisa genuina; te sentías contento de volver a verme. Hacía tanto tiempo que no salíamos y que no teníamos una convivencia tan cercana. Nuestras diferencias parecían haber quedado atrás.
Aún era invierno. Hacía frío. Tenía dos semanas de regresar de un viaje por Nueva York.
"¿Cómo está la ciudad?"-Preguntaste
"Bien"-contesté con indiferencia.
Sugeriste que cenaramos en un restaurante al fondo de la plaza.
El lugar era bonito: una casona anitgua, meseros atentos, buena comida, buen vino...una aparente buena compañía.
Conversamos un poco de nuestros respectivos trabajos, de lo que habíamos hecho en el año y medio en que nos distanciamos. Yo no sonreía, tú sí. Mi gesto te desconcertaba.
Sin mayor preámbulo, me aventuré a preguntarte:
"¿Leíste mi correo?"
"No. ¿Cuál?."
Como quien desenvaina una espada respondí:
"Ahí te decía que...lo mejor es que ya no nos veamos..."
La sonrisa de tu cara se borró al instante. No dabas crédito a las palabras que habían brotado de mi boca.
"¿Por qué?"-Preguntaste.
¿Por qué?, ¿por qué? Y recordé los momentos amargos entre nosotros que aún se encontraban clavados en mi memoria y mi corazón, los desaires, los obstáculos, los resentimientos...y la caja de Pandora se abrió de nuevo.
No supiste como refutarme, sentías el peso de mis argumentos.
"Yo sí quisiera verte aunque fuera de vez en cuando"
"pero yo no"- Respondí fría, como un tempano.
"¿Ya nunca más te voy a volver a ver?"-Preguntaste preocupado.
"Preferiría que no"- Contesté sin inmutarme.
Cuando terminamos la cena caminamos por rumbos distintos. Pululaba un silencio incómodo. Decidiste despedirte con anticipación. Besaste mi mano y noté en tu cara la tristeza sin que yo hiciera el más mínimo gesto. Seguía fría, como si el invierno de Nueva York aún permaneciera en mi interior.
"Si un día quieres llamar...hazlo con toda confianza". -Fue lo último que escuché de tu voz.
Vi tu figura alejarse por los árboles de la Plaza de la Conchita, cabizbajo.
Caminé por la calle Higuera. Sentí un nudo en la garganta.

...y la noche siguió mis pasos.

1 comentario:

Decireves dijo...

demoledor...
y sin palabras.

Pasando a otras cosas, a ver si tengo la oportunidad de conocerte en mi ida al DF, ya se que eres rockstar pero bueno, yo tambien lo soy jajaja...saludos!

Soy el guey ese de Decireves. plop!

Discurso de Jaime López para presentar el libro "Crónica Biciteka" de Georgina Hidalgo. (Producciones El Salario del Miedo, 2021.) Lugar: Fonda El Convite. Fecha: 20 de octubre de 2021.

              ACERCA DE LA CRÓNICA BICITEKA DE GEORGINA HIDALGO VIVAS                                                                     ...